miércoles, 25 de agosto de 2010


LOS DINOSAURIOS
ESOS "LAGARTOS TERRIBLES" DEL MESOZOICO
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Qué es y qué no es un dinosaurio
Con el término dinosaurio se denomina, en la actualidad, a todos aquellos reptiles que vivieron en el Mesozoico, eran terrestres y tenían las extremidades rectas, y no arqueadas hacia afuera como los cocodrilos y los lagartos. Según esta definición, quedan excluidos pterosaurios, reptiles voladores contemporáneos de los dinosaurios, y los plesiosaurios, los reptiles acuáticos que dominaron los mares de la época.
Se consideran dinosaurios no solo los reptiles terrestres gigantes, sino también otros de tamaño medio o a algunos que tenían el tamaño de una gallina. Se cree que, a diferencia del resto de los reptiles, los dinosaurios eran de sangre caliente, como las aves y los mamíferos. También se considera que algunos dinosaurios podrían tener plumas, aunque no se sabe con certeza si recubrían todo su cuerpo o aparecían solo en algunas de sus partes.
La era Mesozoica, Mesozoico o Era Secundaria fue un periodo de la historia de la Tierra que se inició hace 251,0 ± 0,4
millones de años y finalizó hace 65,5 ± 0,3 millones de años
La ciencia duda de muchos tópicos: no se sabe por ejemplo, si el popular tiranosaurio era un carnívoro terrible o un carroñero oportunista, tampoco si era capaz de correr o, por el contrario, solo podía caminar y trotar con un estilo parecido al de una gallina gigante.
REPTILES ANTIGUOS: Durante muchos millones de años, los reptiles fueron los animales más importantes de la tierra. Esa época se denomina Era de los reptiles. Muchos de los reptiles que entonces eran comunes se han extinguido.

Entre los primeros reptiles se contaban los pelicosaunos. Estos reptiles terrestres tenían grandes crestas sobre su lomo. Entre ellos se distinguen el estereorraquis europeo, temible carnicero, y el dimetrodón americano, que medía tres metros.
Los plesiosaurios eran reptiles acuáticos. Tenían un cuerpo alargado y achatado, un cuello muy largo y una cabeza diminuta. Sus patas tenían la forma de remos. Algunos de ellos llegaron a medir más de 15 metros de largo, aunque por lo común no pasaban de 7 u 8 metros. No eran veloces nadadores, pero dotados de dientes largos y puntiagudos, eran excelentes cazadores. Sobrevivieron hasta el final del Secundario, hace unos 700 millones de años.
lctiosaurio significa “reptil pez”. Como vemos en la figuras, este nombre es bien adecuado para esos animales. Los ictiosaurios eran mucho más grandes que los peces actuales. Nadaban rápidamente y también podían saltar. Aunque parecían perfectamente adaptados a la vida marina, desaparecieron antes de finalizar el Secundario.

Descubramos a los dinosaurios



El hombre desconoció la existencia del dinosaurio hasta 1824, cuando se desenterraron en Inglaterra huesos de varias especies de reptiles fosilizados. El paleontólogo británico Richard Owen llamó a estos animales “dinosaurios”, vocablo derivado de los dos términos griegos deinós y sauros, que combinados significan “lagarto terrible”. Este nombre se ha seguido usando hasta el día de hoy, a pesar de que los dinosaurios, aun siendo reptiles, no son lagartos.


A partir de 1824 se han ido encontrando fósiles de dinosaurios en todos los continentes. El registro fósil, que yace en capas de roca sedimentaria, revela que en la época de la historia terrestre denominada era de los dinosaurios hubo una extraordinaria abundancia y variedad de estos animales. Algunos habitaban en tierra seca, otros en ciénagas, e incluso es posible que algunos vivieran en el agua, tal como hacen los hipopótamos de nuestro día.


En la gran llanura central de América del Norte, se han descubierto enormes cantidades de restos de dinosaurios, no solo restos de osamenta, sino también otras pruebas, como por ejemplo huellas. También en las planicies de la zona centro de Alberta el hallazgo de restos de dinosaurios ha sido prolífico, pues entre estos figuran casi quinientos esqueletos completos. En los años veinte algunas expediciones descubrieron huesos de dinosaurio en el desierto de Gobi, en Asia central, y en la década de los cuarenta una expedición soviética descubrió en Mongolia un esqueleto de dinosaurio de unos doce metros de longitud.


La única zona donde todavía no se habían encontrado fósiles de dinosaurios era la Antártida, hasta que en 1986 unos científicos argentinos hallaron el de un dinosaurio herbívoro. Justo antes de ese hallazgo, un investigador americano descubrió huesos de dinosaurio en la fachada ártica de Alaska. Durante los últimos cien años, se han desenterrado depósitos de huesos de dinosaurio en tantos lugares que ha quedado demostrado que en el pasado remoto los dinosaurios estaban muy extendidos.
Paquicefalosaurio

Especie: Pachycephalosaurus Wyomingensis
Su nombre significa Reptil con Cabeza Gruesa de Wyoming. Vivió en el periodo Cretácico tardío. Medía cinco metros y pesaba dos toneladas. Las características más sobresalientes de este herbívoro, son: la enorme bóveda ósea, de hasta 25 centímetros de espesor que presenta en su cabeza, y la serie de prominencias que la circundan. Se cree que dicha estructura le servía en los rituales de apareamiento. Los fósiles de esta especie se han encontrado en Wyoming, Montana y Dakota de Sur, Estados Unidos.


Parasaurolofus

Especie: Parasaurolophus Walkeri
Su nombre significa Semejante al Reptil con Cresta. Vivió en el periodo Cretácico tardío. Medía nueve metros de largo y pesaba dos toneladas. La característica más sobresaliente de este herbívoro es su cresta. Los científicos han propuesto varias teorías que tratan de explicar para qué le servía. Se cree que la utilizaban para emitir sonidos parecidos a los de un trombón y comunicarse entre ellos. Sus fósiles se han encontrado en Alberta, Canadá, y Utah y Nuevo México, Estados Unidos.

martes, 24 de agosto de 2010

La datación de los dinosaurios

Los huesos de dinosaurios casi siempre se encuentran en capas de tierra inferiores a las que contienen huesos humanos, lo que hace que muchos lleguen a la conclusión de que pertenecen a un período de tiempo anterior. Los geólogos dan a esta época el nombre de era mesozoica y la subdividen en tres períodos: cretáceo, jurásico y triásico. Se afirma que la duración de estos períodos es del orden de decenas de millones de años. El cual no es obstante y lleva a preguntarnos: ¿hay algún fundamento sólido en el cual podamos apoyar esta afirmación?



Un método que se utiliza para datar la antigüedad de los fósiles es el denominado método de datación del radiocarbono. Este sistema de datación mide la proporción de desintegración del carbono radiactivo (carbono) desde el momento de la muerte del organismo. “Una vez que un organismo muere, ya no absorbe más anhídrido carbónico del ambiente que le rodea, y con el tiempo la proporción del isótopo va disminuyendo a medida que sufre desintegración radiactiva”, segun como lo dice Science and Technology Illustrated.



Sin embargo, este método presenta serios problemas. En primer lugar, cuando se considera que un fósil tiene 50.000 años de antigüedad, su nivel de radiactividad ha bajado tanto que resulta muy difícil detectarlo. En segundo lugar, incluso en especímenes más recientes, este nivel ha bajado tanto que sigue siendo dificilísimo medirlo con exactitud. Y en tercer lugar, los científicos pueden medir el nivel actual de formación de carbono radiactivo, pero no tienen manera de medir las concentraciones del carbono que había en el pasado remoto.



De modo que tanto si se utiliza el método de radiocarbono para datar los fósiles, como si se utilizan otros métodos —como el del potasio radiactivo, el uranio o el torio— para datar las rocas, los científicos no pueden establecer después de tantísimos siglos los cuáles eran los niveles originales de tales elementos. Melvin A. Cook, profesor de Metalurgia, hace el siguiente comentario al respecto: “Estas concentraciones [de materias radiactivas] solo pueden suponerse, de modo que las edades obtenidas así no pueden ser mejores que esta suposición”. (Esto es especialmente cierto si tenemos en cuenta que el diluvio del día de Noé ocurrido hace más de cuatro mil trescientos años produjo enormes cambios en la atmósfera y en la superficie terrestre).



Charles Officer y Charles Drake, geólogos de la universidad de Dartmouth (Canadá), hacen surgir aún más dudas respecto a la exactitud del método de datación radiactivo. Ellos dicen: “Deducimos que el iridio y otros elementos encontrados con él no fueron depositados de manera instantánea, sino que más bien hubo un influjo intenso y variable de estos componentes durante un intervalo de tiempo geológico relativamente breve del orden de 10.000 a 100.000 años”. Ellos razonan que la ruptura y desplazamiento de los continentes trastornó el entero globo terráqueo, causando erupciones volcánicas, bloqueando la luz del Sol y ensuciando la atmósfera. Entonces lo cierto es que tales sucesos desbaratadores pudieron cambiar los niveles de radiactividad, lo que tergiversaría los resultados obtenidos mediante los relojes radiactivos de nuestros días.



El relato de Génesis y los dinosaurios

Aunque el método de datación radiactivo es innovador, todavía se basa en la especulación y la suposición. En contraste, el relato de la Biblia registrado en el libro de Génesis sencillamente menciona el orden general en que tuvo lugar la creación, lo que permite la posibilidad de que transcurriesen miles de millones de años para la formación de la Tierra y muchos milenios, para su preparación con vistas a ser habitada por el hombre.

“Varios autores han sugerido la posibilidad de que los dinosaurios desaparecieran porque el clima empeoró o porque empeoró la dieta. Otros escritores han responsabilizado de ello a enfermedades, parásitos, cambios en la presión o composición de la atmósfera, gases venenosos, ceniza volcánica, oxígeno excesivo procedente de las plantas, meteoritos, cometas, reducción del depósito común de genes provocada por mamíferos devoradores de huevos, radiación cósmica, desviación de los polos con respecto al eje de rotación de la Tierra, inundaciones, deriva continental, desecación de ciénagas y lagos, manchas solares.” (The Riddle of the Dinosaur [El enigma del dinosaurio].)

Es posible que algunos dinosaurios (y pterosaurios) hayan sido creados en el quinto período mencionado en Génesis, cuando la Biblia dice que Dios hizo “criaturas voladoras” y “grandes monstruos marinos”, entre otros, en el sexto período. Si se tiene en cuenta la abundancia de vegetación que sin duda existía en el tiempo de los dinosaurios, habría sido muy apropiada la presencia de un número tan elevado de animales con un apetito voraz. (Génesis del capitulo1 y en las pags. 20-24.)



Una vez que los dinosaurios habían cumplido su propósito e la tierra, Dios puso fin a su existencia. No obstante, la Biblia guarda silencio en cuanto a cómo y cuándo lo hizo. Entonces de lo que sí podriamos estar seguros  ees de que los dinosaurios fueron creados  con un propósito definido, aunque de momento no este por completo comprendido cuál fue ese propósito. Entoces podemos dicir que no vinieron por error, ni fueron producto de la evolución. Su súbita aparición en el registro fósil sin ninguna conexión con algún antecesor fósil y su desaparición sin dejar fósiles de transición, son pruebas en contra de la opinión de que tales animales evolucionaron de forma gradual a lo largo de millones de años. Por consiguiente, el registro fósil no apoya la teoría de la evolución. Al contrario, armoniza con el punto de vista bíblico de que la vida animal fue creada por Dios.

domingo, 15 de agosto de 2010

Los mosasaurios fueron unos lagartos marinos que existieron en muy diversas partes del mundo. Los más grandes medían de 9 a 12 metros de largo. Muy comunes durante el Cretáceo, fueron posiblemente los reptiles marinos más temibles,
También existieron en el Secundario reptiles voladores, llamados pterosaurios (reptiles con alas). Se conocen fósiles del pterodáctilo, armado con poderosos dientes, y del pteranodón, el último de los pterosaurios, cuyas alas extendidas medían unos ocho metros.
Las aves descienden de los reptiles, pero no de los reptiles voladores, que no dejaron descendientes después del Jurásico. De todos los reptiles que vivieron en esa época, los dinosaurios son los más conocidos. Los más grandes de ellos fueron los animales más gigantescos que hayan vivido en la tierra.
Pero al final del Cretáceo, vastas planicies reemplazaron a los mares, que se secaban. Aparecieron grandes selvas, y este nuevo universo no convino a los dinosaurios, que no encontraban su alimento habitual. En realidad, incapaces dé adaptarse, desaparecieron poco a poco. La desaparición de los dinosaurios señala el fin de la Era de los reptiles.
LOS DINOSAURIOS
Los dinosaurios de los que existieron millares de especies, no vivieron todos en el mismo periodo geológico. Los científicos los dividen en dos órdenes: los ornitisquios reptiles herbívoros bípedos so cuadrúpedos que poseian a la vez pico y dientes y tenían pelvis semejantes a la de las aves, y los saurisquios , con pelvis de reptil, que comprendían a los terópodos, reptiles carnívoros de afilados dientes, con las patas delanteras relativamente cortas y terminadas en tres dedos con garras agudas, y los saurópodos, reptiles hervíboros cuadrúpedos de piel desnuda, cola larga, cabeza pequeña y talla gigantesca.